No somos los únicos.

Como sabemos, los únicos preocupados por el cambio climático no somos nosotros, acá te mostramos algunas conclusiones sacadas por los países emergentes.

Ellos dicen que no sólo los problemaa afectan a la naturaleza, sino que traen con ellos, el avance de enfermedades. Tal es el caso de las inundaciones y sequías, que generan por ejemplo diarreas, vómitos y otras patologías. Otro caso es actualmente la contingencia del mosquito Aedes Aegypti o la tropicalización de las enfermedades endémicas en otras partes del planeta. Por ejemplo en Argentina un importante porcentaje de personas tienen enfermedades crónicas, por lo que, tanto los calores como fríos extremos, que generan descompensaciones o cuadros crónicos, generan mortalidad y morbilidad, lo cual exige establecer un conjunto de planes y contingencias frente a fenómenos imprevistos, como las inundaciones, tornados o accidentes.
Si bien los países emergentes no contribuye mayoritariamente al calentamiento global, está en riesgo de sufrir los graves efectos del cambio climático global, pudiendo enfrentar serios problemas para alcanzar un desarrollo social y económico sustentable en relación con el medio ambiente, dada la estrecha relación entre los recursos naturales de los países y sus desempeños económicos.
Destacamos el esfuerzo por reparar los daños que esos cambios climáticos ocasionan en la salud de los pueblos y las medidas que pueden ayudar a la adaptación a esos cambios. Se procura preparar a la población para afrontar los riesgos directos e indirectos, principalmente para las poblaciones más vulnerables (niños, ancianos y pobres).
De todas maneras, a través de un informe aseguramos que es viable revertir la situación, pero que todo atraso resultaría peligroso y mucho más costoso. Asimismo, revelamos que quienes se verán afectados en forma más inmediata y con mayor incidencia, son los países más pobres que son los que menos han contribuido a las causas del cambio climático, lo cual, para nosotros, revela una gran injusticia.